A pesar de que la temporada de incendios forestales se ha retrasado debido a la meteorología, en los últimos días se han sucedido los incendios, por ejemplo en Ceuta, Casares (Málaga), Cala Estellencs (Mallorca) que además, han puesto en peligro a la población por su cercanía.
La campaña contra incendios forestales (prevención y extinción) puesta en marcha por el Gobierno central está dotada con 85 millones de euros, que incluye 1.000 personas y 73 aeronaves con capacidad para intervenir en cualquier lugar de España repartidas en 37 bases y 10 Brigadas de Lucha contra Incendios Forestales (BRIF). Además, se ha sumado una campaña de sensibilización: “Para no ser el responsable, sé responsable”, con el objetivo de alertar a los ciudadanos sobre el riesgo de las barbacoas, quemas de rastrojos, cigarros encendidos, etc.
La conciencia ecológica general y el acercamiento de las llamas a la población hacen que cada vez más sea un tema de primera magnitud que afecta a la gente y que debe tener la respuesta adecuada.
Desde el plano de las tecnologías de la lucha contra el fuego forestal, desde TECNIFUEGO, aconsejamos instalar en las poblaciones y urbanizaciones una red de hidrantes contra incendios.
En el equipamiento que utiliza el personal de extinción de incendios, juega un gran papel la colaboración estrecha entre las empresas desarrolladoras de tecnología con los cuerpos y fuerzas de extinción de incendios, conociendo las necesidades y aportando equipos adaptados a ellas. Por ejemplo, se ha avanzado mucho en mangueras y lanzas. Mangueras que resisten el calor y que aportan más caudal, con mejor radio de curvatura, sean más flexibles y manejables; igualmente las lanzas han evolucionado en la distribución del agua, con lanzas que cumplen la norma europea de lanzas EN 15182 de bajo mantenimiento con posibilidad de seleccionar caudales pequeños.
Igualmente, se utilizan técnicas de simulación avanzadas, para investigar incendios producidos, analizar y/o verificar riesgos de zonas concretas y estudiar cual es la efectividad de los equipos.
El desarrollo de los nuevos vehículos contra incendios de última generación con categoría G (todo terreno), permiten a los cuerpos de bomberos llegar y transportar sus equipos y reservas de agua por zonas de difícil acceso. Su equipamiento está dotado con potentes bombas capaces de alcanzar presiones de agua de hasta 20 bar en media presión y 40 bar en alta presión, mangueras de alta presión para uso profesional y servicio duro, de elevada resistencia a las duras condiciones de este tipo de incendios, y lanzas de caudal regulable.
Terminar mencionando los nuevos retardantes/aditivos para evitar la propagación, que optimizan la capacidad enfriadora del agua, consiguiendo unos tiempos de extinción muy notables, y dificultando la reignición y el avance del incendio en las áreas tratadas durante un corto período de tiempo.
La problemática de los incendios forestales requiere soluciones globales y de diversas especialidades: preventivas, urbanísticas, legislativas, de autoprotección civil. Coordinando todo ello, las administraciones deben hacer cumplir la normativa y realizar frecuentes campañas de sensibilización a la población (sobre todo en interfaz urbano-forestal) para crear conciencia y generar actividades de autoprotección.