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SEGURIDAD CONTRA INCENDIOS EN VIVIENDAS Y COMUNIDADES DE VECINOS: CONSEJOS BÁSICOS

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QUE HACER EN CASO DE INCENDIOUna vez más la tragedia: cuatro menores fallecieron anoche en el incendio de su piso en El Vendrell (Tarragona), y otras 5 personas de la misma familia resultaron heridas, dos de ellas, de gravedad.

Para hacer frente a estos sucesos, algunas comunidades autónomas (Extremadura, País Vasco, Islas Baleares) y ayuntamientos han comenzado a instalar en los programas de tele asistencia el detector de incendios en hogares de personas mayores. Es una aplicación de fácil instalación y muy efectiva para avisar de un incendio.

Otras acciones que deberían ser ya comunes en todos los ayuntamientos, son las campañas de prevención de incendios, coordinadas por bomberos, en las comunidades de vecinos, y que incluyen simulacros de incendio y evacuación, autoprotección, y las normas básicas para prevenir incendios. Además realizar comprobaciones de los sistemas de abastecimiento de agua contra incendios (red de hidrantes), que se hallan distribuidos por todo el municipio: su localización en el plano, su presión y su caudal; inspeccionar las instalaciones de protección contra incendios y su mantenimiento, etc.

Aunque insuficiente, algo se está avanzando en la sensibilización e implicaciones de las instituciones. Algunos ayuntamientos están tomando cartas en el asunto y realizan simulacros de incendio en comunidades de vecinos y colegios. Asimismo, la Comunidad de Madrid, la Federación Madrileña de Municipios, la Fundación Mapfre y la APTB (Asociación profesional de técnicos de Bomberos), iniciaron una ejemplar campaña en diciembre «Este invierno protege tu hogar» (50% de las víctimas se producen en invierno) para acercar al ciudadano las medidas básicas de prevención y protección frente a incendios.

En redes sociales bajo la etiqueta #detectores YA, cada vez más profesionales y especialistas reclaman una actuación de las administraciones, y una concienciación en general del ciudadano.

Un ejemplo a seguir es el del ayuntamiento de Derio (Vizcaya), que está patrocinando y subvencionando una campaña para instalar detectores de humo autónomos en las viviendas de mayores de 75 años, a fin de que las personas mayores que viven solas puedan vivir de manera segura.

LA PROTECCIÓN ES POSIBLE
Los expertos de TECNIFUEGO-AESPI son conscientes de que la protección es posible, y que tomando ciertas medidas de prevención y seguridad se pueden reducir drásticamente los daños por incendio: revisión anual de la red eléctrica, evitar la sobrecarga de enchufes, evitar las situaciones de riesgo, como cacerolas y sartenes en el fuego sin vigilancia, velas encendidas, estufas encendidas por la noche, fumar en la cama, etc., y la instalación de medidas de seguridad (detectores de humo , extintores, rociadores, protección de las estructuras y materiales, evacuación de humos, puertas cortafuego, etc.) que protegen, alertan y extinguen en los inicios de un incendio.

En todo tipo de edificios de viviendas, sea cual sea su antigüedad, independientemente de lo que ordena el Código Técnico de la Edificación (CTE), los especialistas en seguridad contra incendios, recomiendan la instalación de los siguientes equipos básicos en una vivienda, zonas comunes y garajes:

Extintor: en caso de conato o primera fase del incendio, se utiliza fácilmente y siempre dirigiendo la manguera a la base de la llama.

BIE: La boca de incendios equipada es idónea para instalarse en el portal y pasillos. Es fácil de usar, eficaz e inagotable ya que funciona con agua de la red.

Detección: los detectores automáticos proporcionan gran seguridad mientras se duerme, ya que son los equipos más precoces que avisan por medio de sirenas e indicadores visuales asociados del posible incendio para proceder a la evacuación del edificio y activar los equipos de extinción automática (si van asociados a rociadores automáticos, por ejemplo).

Rociadores automáticos. Permite sofocar el incendio con la acción directa del agua a través de los rociadores que son alimentados por tuberías. Se activan automáticamente.

Ignifugación de los materiales: Conviene tener en cuenta el grado de reacción al fuego de los elementos de revestimiento de techos, paredes, suelos, mobiliario y elementos decorativos en general. Lo deseable es que tengan la menor contribución al fuego.

Compartimentación y protección estructural. Todos los elementos constructivos que componen una vivienda deben cumplir con una característica de resistencia al fuego que permita la evacuación de las personas y la intervención de los bomberos.

Control de humos en la escalera y garajes: El objetivo es mantener las vías de evacuación que discurren por ella a una presión superior por medio de un sistema mecánico de suministro de aire fresco, para impedir que el humo invada la escalera o el garaje y dificulte su evacuación.

Señalización de emergencia. Especialmente para las vías de evacuación.

Puerta cortafuego. Elemento fundamental en el compartimento de zonas de evacuación, por ejemplo, escaleras de emergencia, en los pasos a garajes y accesos al edificio.

COMUNIDADES DE VECINOS
En comunidades de vecinos se deberían hacer periódicamente (al menos una vez al año) campañas de prevención de incendios, incluyendo simulacros de incendio y evacuación.

Se podría realizar tras visualizar un vídeo o folleto divulgativo que suelen distribuir, o se pueden solicitar, a los servicios de extinción de los ayuntamientos sobre qué hacer en caso de incendio, vías de evacuación, salida de emergencia, señalización de emergencia, etc.

Además, desde TECNIFUEGO-AESPI se recomienda la instalación de sistemas de seguridad contra incendios en los edificios y comprobar periódicamente su buen estado y mantenimiento.

Lo principal, en todo caso, es prevenir, manteniendo los equipos eléctricos (cables, enchufes, estufas) en buen estado, prestar especial atención a hornillos, braseros, chimeneas, no dejando encendido nunca por la noche ningún aparato. No descuidar sartenes u ollas en la cocina encendida, limpiar periódicamente la campana de extracción de humos, no fumar en la cama; e instalar los sistemas y equipos de seguridad contra incendios señalados en el edificio de viviendas. El mantenimiento periódico de los mismos sirve para que estén operativos en caso de necesidad.